Desde el Centro Europeo de Desarrollo de la
Formación Profesional (CEDEFOP) el maltés James Calleja nos avisa de lo que
deberíamos saber todos nosotros en España. La FP no enseña bien lo que se
necesita en el mercado laboral.
El desempleo juvenil en España es del
55%. Pero en Alemania es del 7,9% o en Holanda del 11%. Y no se nos cae la cara
de vergüenza.
Es el futuro después de ser ya el presente. Y los españoles
sabemos bien qué necesitamos, pero en cambio no hacemos lo suficiente para
lograrlo.
No se enseña lo que
se necesita. Hablo de contenidos, no de familias y ramas profesionales.
No hay una unión
entre la Secundaria y la Formación Profesional
No se enseña a crear
empresas, a ser emprendedores.
No se enseña suficiente
a trabajar en equipos, a lograr inversores externos, a presentar proyectos que
logren convencer.
Hay que lograr que
baje el abandono escolar, que se alargue el periodo formativo.
Hay que buscar más puentes
que sirvan con control y calidad para ascender en los procesos formativos, facilitando
el paso entre los distintos sistemas formativos.
Hay que potenciar la
formación por la formación, no por tener un “diploma”. Internet es un buen
vehículo de formación no reglada y gratuita, de formación complementaria que
debería ser fomentada desde organismos públicos.
Hay que asumir que
debemos ser alumnos toda la vida, adaptarnos a los cambios tecnológicos de
nuestra profesión. Aprender sin tener que ir a la Universidad es posible.
Hay que encontrar
sistemas de certificación que validen lo que cada persona va aprendiendo en su
vida laboral y en su proceso formativo continuo.