¡Qué rápido pasa el tiempo! Parece que fue ayer cuando mi vida dio un giro de ciento ochenta grados. Como cuando vas por una calle y tuerces la esquina. De repente ya no ves lo que antes tenías delante. El panorama es distinto, lo que era presente y futuro se ha convertido en una imagen del pasado que se borra en un abrir y cerrar de ojos. Sin embargo, hay recuerdos que permanecen aferrados a nuestra vida. Como aquel día.
Así empieza el nuevo libro de una amiga, de una escritora que me ayuda a aprender. Sé lo que le costó publicar el primer libro, y cómo ahora, los "niños" van saliendo a la calle con más decisión, con más soltura. Esto de escribir es sencillo, pero lo de publicar muy complicado, así que lo mejor es disfrutar de lo más fácil de todo, escribir y escribir, soñar con letras y no con papel.
El vuelo de este nuevo libro es largo, es profundo, es como otros suyos, un trabajo dirigido a los adultos de 12 años.
Así empieza el nuevo libro de una amiga, de una escritora que me ayuda a aprender. Sé lo que le costó publicar el primer libro, y cómo ahora, los "niños" van saliendo a la calle con más decisión, con más soltura. Esto de escribir es sencillo, pero lo de publicar muy complicado, así que lo mejor es disfrutar de lo más fácil de todo, escribir y escribir, soñar con letras y no con papel.
El vuelo de este nuevo libro es largo, es profundo, es como otros suyos, un trabajo dirigido a los adultos de 12 años.