Se admiten ideas aunque sean usadas, viejas, perdidas, imposibles, locas, talladas en vivo, solitarias o incapaces.
Es tal la falta de ideas, que casi todas nos tienen que servir por incompetencia para encontrar ideas adaptadas a nuestra realidad.
Luego ya las iremos puliendo.
¿Donde las recogen me preguntas?
En la calle, aquí, en tu barrio, con tu gente, en el trabajo, en toda la sociedad. Pueden ser ideas ya usadas, viejas o imposibles, ideas prehistóricas, de los griegos. Todo sirve para ir rebuscando y ver si alguna nos sirve. Es que como no tenemos ninguna, no se sabe, igual una de la Edad media no funciona muy bien.
La viñeta es de Perich.