29.4.11

El desempleo juvenil en España aumenta hasta el 45%. En cuatro autonomías supera el 50%

El desempleo juvenil en España es brutal. La tasa de paro entre los jóvenes de Andalucía, Canarias, Valencia y Extremadura supera el 50%. No obstante, la peor situación se registra en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, donde el porcentaje de menores de 25 años sin trabajo alcanza el 57% y el 58% según los datos de la EPA del primer trimestre de 2011.
Entre los territorios con menos paro juvenil, Navarra y País Vasco son las regiones con menos desempleo juvenil aunque manteniendo tasas del 28% y el 30%.
En estos momentos los jóvenes entre 16 y 25 años y en condiciones y deseos de trabajar, que no pueden hacerlo al estar desempleados, es del 45%. Para que tengamos una idea de lo que esto representa, hay que señalar que España entró en la crisis económica a finales de 2007 con una tasa de paro juvenil inferior al 18%.
Pero en algún momento nos vendrán las soluciones, en algún momento lograremos salir de la recesión, pero los daños en el tejido social de la juventud actual se mantendrán. Habrán trabajado menos años, no lo habrán hecho en los años imprescindibles de su inicio laboral, estarán llenos de diplomas y nula experiencia laboral, tendrán que cobrar sueldos altos para poder emanciparse rápidamente sin poder tener una productividad con arreglo a sus conocimientos ni presuntos sueldos. No es lo mismo en la sociedad futura, tener a una generación entera que logra acceder al trabajo con casi 30 años que si lo hace con 22. No es lo mismo que haya una sobre oferta de titulaciones en el desempleo que si lo hay que personas con experiencia. Las soluciones deberían ser bien distintas por mucho que en realidad poco se puede hacer para buscar estas. Tendremos las que podamos y aquellas que sepamos encontrar y gestionar.
Insistimos desde aquí que en España es complicado crear empresas, y que la solución pasa por dotar de más vida a las ya existentes, pero también de apoyar la creación de microempresas que puedan servir de viveros a empresas que van creciendo y creando empleo. Deberíamos pasar del apoyo pasivo al autoempleo a la ayuda activa a la creación de microempresas laborales de al menos 3 personas.