Escuchaba el otro día a un entrenador laboral, a un gurú de la formación personal decir algunas cosas que me gustaron y además enfocaban el paso de la escuela a la universidad de una manera totalmente distinta a la habitual, aunque común en algunos países europeos y americanos. Era un planteamiento que hacía alrededor del número 4.
Decía que antes de ir a la Universidad, a una carrera ya determinada y elegida muchas veces por consejos de amigos o familia, había que estar 4 años deambulando (pero nunca perdiendo el tiempo) y aprendiendo temas complementarios, para saber qué se quiere hacer con la vida.
La Universidad es una gran inversión, para la familia, para el Estado y para cada uno de nosotros.
Y para ello, los alumnos, planteaba como reto trabajar parcialmente en 4 oficios diferentes, o estudiar 4 oficios distintos solo para probar con cuál de ellos nos sentíamos mejor. Ninguno va a ser de antemano el elegido, ya veremos al final, pero no hay que saltarse esa norma. Serán 4 actividades laborales diferentes y hay que acabar el proceso.
Nos aconsejaba que se fuera de viaje a 4 países diferentes un tiempo suficiente (meses si es posible y trabajar allí esos oficios de los que hablaba antes) para aprender de esa sociedad algo distinto a la tuya.
Y nos decía además que había que aprender 4 idiomas: el que ya tenemos, otro en el que debíamos sentirnos muy bien, sabiendo defendernos tanto en lectura como a la hora de hablar y escuchar, y luego otros dos idiomas sobre los que deberíamos tener conocimientos suficientes para entender lo básico y para lograr fácilmente mejorarlos y aprender mucho mas a poco que lo necesitáramos.
Pongamos un simple ejemplo para entenderlo mejor.
Trabajamos de camarero, oficinista, comercial, cadena industrial.
Visitamos Francia, Inglaterra, los EEUU y Chile
Aprendemos inglés, francés y algo de alemán. Ya sabemos castellano y es fácil aprender catalán e italiano.
Estudiamos Arte, Urbanismo, Derecho y Psicología o Sociología.
Sabemos que el 75% de lo que vamos a realizar en esos 4 años lo vamos a utilizara menos de lo que pensamos ahora, pero todo, el 100% va a ser útil para nuestra formación posterior, sea esta la que sea.
¿Pero vas a entrar 4 años tarde a la Universidad? Tal vez, no lo sé. ¿Cuántos alumnos van cambiando de Carrera Universitaria, hasta que encuentran la que les gusta?
¿Cuántos suspenden asignaturas hasta convertir una carrera de 4 años en un periodo de 6 años?
¿Quién dice que con 18 años se está en condiciones de tener esa madurez suficiente como para saber ya, sin conocer antes lo básico, a qué le vas a dedicar toda tu visa posterior?
¿No es posible que con 21 años se acierte más y mejor en estas decisiones?
Personalmente creo que cuatro años son excesivos, y que 4 semestres pueden servir igual si se saben aprovechar. Incluso 4 cuatrimestres si se organizan bien.
Encadenar conocimientos diversos ayuda a crecer y a saber con claridad qué nos gusta y qué queremos hacer con la vida.