Un detalle que me enseñaron en mis ya viejos cursos de fotografía, y que curiosamente sirve como parábola para el mundo empresarial, es que en la vida si no enseñas las pelotas de fútbol, no sirven de nada las acciones que enseñas con tus acciones.
A los demás, a los que observan, les importan poco las posturas, los gestos, los intentos por ganar o perder. Quieren resultados, quieren ver la pelota con la que se mete gol, con la que se ganan beneficios.
Conocer el objetivo de tu empresa es primordial. Debemos tenerlo claro todos los que intervenimos en los éxitos y es fundamental para que tenga sentido el esfuerzo por ganar, por tener éxito en la lucha.
En la imagen más alta varios hombres intentan llenos de sudor y movimiento gestuales muy duros, alcanzar no se sabe qué.
Conocer el objetivo de tu empresa es primordial. Debemos tenerlo claro todos los que intervenimos en los éxitos y es fundamental para que tenga sentido el esfuerzo por ganar, por tener éxito en la lucha.
En la imagen más alta varios hombres intentan llenos de sudor y movimiento gestuales muy duros, alcanzar no se sabe qué.
No vemos el objetivo, la meta.
Como visten de una forma determinada, sabemos qué empresa están intentando realizar con su trabajo, pero solo por el escenario, solo por eso nos imaginamos qué quieren hacer.
En este caso es una pelota blanca como vemos en la segunda imagen y con ella ya todo tiene sentido.
Es necesario conocer el objetivo, tenerlo visible.
En este caso es una pelota blanca como vemos en la segunda imagen y con ella ya todo tiene sentido.
Sabemos qué meta quieren conseguir. Meter gol y ganar.
Ahora ya todo tiene lógica, sabemos hacia qué objetivo se dirigen en su empresa estos hombres con sus trabajos.
Ahora ya todo tiene lógica, sabemos hacia qué objetivo se dirigen en su empresa estos hombres con sus trabajos.
Sabemos cual es la meta. Qué quieren ganar, o qué pueden perder si no lo consiguen.