Una muestra de que seguimos casi igual, de que el ser humano se sabe todas las trampas posibles y las repite y las repite, para hacerse rico, está en este viñeta del dibujante Máximo del año 1971.
Hace 51 años de ellas, y estamos en las mismas. Quieren enriquecerse a costa de subir sus beneficios, sean en forma de mayores precios de venta, de peores calidades o de vender menos por más.