Las dudas propias siempre están encima de nosotros. Somos la flecha que todo quiere atravesar, pero siempre dudamos de nosotros mismos y de nuestras decisiones.
Manzana o corazón.
Obligación o devoción.
Amor o trabajo.
¿Sólo tenemos un disparo?
Calma, pensemos antes de utilizar el que consideramos nuestro único disparo. Reflexionemos, pensemos en nosotros mismos. Somos lo más importante, lo único importante pues si fallamos, si faltamos, nos quedamos en nada.
Nada es sencillo, nada es seguro, nada es eterno.