14.9.24

Nueve claves para vencer el miedo, la ansiedad, la angustia



Toda persona tendrá que asumir riesgos en su vida. Los líderes sin duda, pero también las personas normales. Todos. Tú y yo. Así que tendremos que ir preparándonos para salir airosos de esos riesgos inevitables.

Ante los riesgos, los problemas más frecuentes que debemos resolver y soportar serán aguantar bien las críticas, el miedo a fracasar, asumir tus propias limitaciones e intentar conocer bien a los demás, para así poder trabajar en equipo o incluso para vencer los temores lógicos de cualquier actividad nueva. 

Hay que crear una especie de coraza alrededor de nosotros para sentirnos fuertes, para saber defendernos sin muchas heridas, y para aumentar nuestras defensas.

Tú vales lo que vales, que no sabemos de momento cuanto es, pero que por mucho que te halaguen no es más, y que por mucho que te critiquen no es tampoco menos. 

Los que te rodean puede calificarte, juzgarte y valorarte. Pero por mucho que te incidan sus opiniones, la verdad es que vales lo que ya valías antes de que te dijeran nada. 

Ni positivo ni negativo debe ser de entrada el valor de su comentario. Valemos y servimos con independencia de lo que nos digan, aunque hay que escucharlo y reflexionar, pero sin darle excesiva importancia.

Tus decisiones pueden no gustar, seguro que no podrán gustar a todos, pero también es cierto que te gustarán a ti. 

Tu vas a tomar las decisiones que consideres mejores en cada momento

Si te equivocas tendrás que revisar tu manera de decidir, pero lo harás por el fracaso, no por lo que digan de ti los demás. 

Los escucharás para aprender, pero no para sufrir.

En la vida no nos equivocamos, excepto si los resultados obtenidos no son buenos. No existen los errores, existen los resultados buenos o malos. 

Pueden ser resultados a corto plazo o resultados a largo plazo. Si crees que te estás equivocando…, casi seguro que te estás equivocando. 

Pero eso no quiere decir que estés equivocado, tal vez sea que el camino emprendido no sea el mejor y lo que debes hacer no es cambiar el lugar de la meta, sino el camino a recorrer. No el fondo, sino las formas.

Todos nos equivocamos en algunas de las decisiones que tomamos. Sobre todo las personas que tomamos muchas decisiones. Es progresivo. 

NO se equivoca quien NO toma decisiones. 

Pero muchas veces estos errores lo son por no saber vigilar bien los caminos emprendidos, no porque no sepamos a dónde nos dirigimos.

Nadie es perfecto. Los que parecen perfectos tienen la suerte de NO ser perfectos, pero no se enteran. 

Todos actuamos con arreglo a patrones aprendidos por nuestra experiencia y es imposible no tener en nuestra mochila polvo, equivocaciones, sensaciones que no supimos valorar bien. Todos tenemos un margen de error que debemos asumir como inevitable. Somos humanos e imperfectos.

Tú eliges, así que reflexiona antes de decidir. Cada día eres más sabio, tienen más experiencia de vida, más carga emocional y más soluciones. El tiempo enseña y cura, te hace más fuerte, más listo para saber resolver problemas.

Si tienes dudas pregunta, consulta, habla, pide ayuda, escucha. 

Elije a una persona que esté centrada, que sea válida, que sepa mantener prudencia y secretos, que sea equilibrada. 

Necesitamos siempre a alguien que no deje reflexionar, pues las soluciones las debemos encontrar nosotros para creérnoslas bien. Del otro necesitamos LUZ; que nos abra nuestros ojos.