Entre el humor sexualmente correcto debe caber algo del incorrecto, pues hacer reír es casi y muchas veces, incorrección de la buena. Las mujeres y los hombres, lloran. Por dentro y por fuera. En silencio o a escondidas. Todos lloramos. Llorar es vaciar, es oírse, es tomar conciencia. Pero esto es tan solo humor.