Todos tenemos celebraciones puntuales o fechas señaladas en las que llevamos unos días de excesos gastronómicos, de ataques (como poco leves) a nuestro propio cuerpo y por ello a nuestra salud. Para compensar y para ponernos en la situación anterior nos toca después hacer algunos pequeños cambios y tomar algunas decisiones, para compensar esos abusos sobre todo gastronómicos.
¿Qué hemos hecho mal?
— Hemos comido mucho más de lo recomendable
— Hemos bebido más alcohol del acostumbrado
— Hemos ingerido más grasas de las que deberíamos
— Y sobre todo hemos tomado más azúcar —de una manera o de otra o de todas— de la que es buena para nuestra salud.
Todo esto además de que posiblemente hemos realizado menos ejercicio, y esto…, nos lleva a decidir que hay que controlar mucho más la salud.
La glucosa si nos la tomáramos ahora, sobre todo si nos hiciéramos un test de Hemoglobina Glicosilada, nos preocuparíamos poco bastante.
La glucosa si nos la tomáramos ahora, sobre todo si nos hiciéramos un test de Hemoglobina Glicosilada, nos preocuparíamos poco bastante.
¿Y qué podemos hacer?
Sin duda hacer "media" dieta, es decir comer menos y mejor, s dice que un día a dieta rigurosa es bueno. pero sin duda, estar un par de días comiendo menos, lo justo, es también muy bueno.
Tomar más líquidos sin azúcar, más verdura, cuidado con la fruta si es dulce, menos grasas, alguna tortilla por ejemplo de espárragos o de alcachofas, sopas de verduras o de pescado, algo de pescado azul o blanco a la plancha, tomar otra vez verdura, insistir en hidratarnos con más agua, y nada de alcohol.
Y sobre todo empezar con más movimiento. Si puedes por edad hacer bicicleta normal o estática, gimnasio, correr o natación pues maravilloso. Y si no, pasar de los 4.000 pasos mínimos al día al objetivo de los 10.000 pasos día durante 15 jornadas de compensación de los abusos y a una velocidad un punto más rápida.
Más relaciones personales, algo de silencio, de música, incluso de sexo, de tranquilidad, de escucharte a tí mismo, pues se trata de limpiarte el estómago, los intestinos y la cabeza.
Respirar en el parque es fabuloso, una zona verde es milagrosa, pasear rápido es un premio. Recuperar la naturaleza es imprescindible.
Poco pan, nada de arroz o patatas, limpieza, limpieza interior, vaciar mejor todo el cuerpo de toxinas, y empezar el Nuevo Tiempo con buena cara y el cuerpo algo más limpio de toxinas.
Ajovín