9.6.22

Qué necesitamos las personas mayores


Las personas mayores —digamos los mayores a partir de los 65 años— tenemos algunas necesidades y cuidados diferentes a las que necesitan los jóvenes, pero otras necesidades en absoluto son diferentes e incluso hay algunas que se acrecientan con la edad, como la necesidad de ser queridos y respetados, apoyados y escuchados. 

Digamos que en general, con la edad, nos volvemos levemente más sensibles a la sensación de abandono. 

Se nos arrugan un poco los exteriores de la vida, pero el núcleo sigue intacto.

Aunque las personas mayores sí necesitamos algunos elementos diferenciados y hay que remarcarlos. 

Debemos todos nosotros, los que ya somos mayores, conocer qué necesitamos potenciar, cuidar e incluso mimar entre nosotros y si es posible, solicitar que se logre desde nuestro mundo exterior eso que nos ofrece algo de autoestima y de salud. 

No se trata de vivir más años, sino de vivir con más salud.

Por ejemplo hacer ejercicio. Hay que andar más. 

Como poco… hay que andar una hora al día, a marcha de unos 5 km. a la hora, con ritmo alegre y si nos aburrimos con esta necesidad nos podemos poner cascos y escuchar la radio o la música prehistórica que nos guste. 

Tener un pequeño huerto urbano en un balcón es otro ejercicio fácil, unas macetas o un animal de compañía ayuda al ejercicio continuo y relaja mucho.

Hay que comer menos y mucho mejor. 

Menos carne, menos grasas, menos alcohol, menos alimentos procesados, más verdura y fruta. 

Así que para compensar hay que disfrutar más de lo que sí podemos comer, y si tenemos que tomar poco de algo, saboreemos ese “algo” con calma. No se trata de prohibir, sino de controlar, saber medir los excesos para que no sean excesos sino gozos.

Digestiones pesadas prohibidas. 

Cinco comidas y a la cama cuando tú quieras, pero tras cenas suaves y con unas horas entre esa cena y la cama. Es simplemente salud, son años de vida. Pero tienes libertad para morirte cuando quieras.

Hay que emplear más el cerebro en positivo. 

Pensar, hablar, escribir, volver a pensar. Nada de negativismo, nada de tristezas, nada de ponernos a sudar mentalmente para defender posturas. 

Sudokus, crucigramas, pintar, talleres de convivencia, cocina.

Calma, tranquilidad, pues todo está ya hecho por el propio Sistema y aunque nosotros debemos pensar y repensar sin tregua, hay que hacerlo desde el positivismo y trasmitir sólo si se nos pregunta, pues no sabemos hacia dónde van nuestras palabras.

Controlar la glucosa y el colesterol es importante, pero el estrés también. 

Hay que relacionarse con personas y no con máquinas, hay que hablar y reír.

Hay que tocarse, volverse a tocar, a sentirnos, a dejar que nos toquen. 

Hay que tomar el sol y viajar. Mira, viajar es muy sencillo. Se puede viajar a los EEUU o al barrio de tu ciudad que tiene un parque. 

Viajar es querer moverse. Viajar es tan importante que la Sanidad se inventó los Viajes del Imserso para poderlos recetar como medicación.

Nunca estés sola ni solo 

Intenta por todos los medios no estar solo. La soledad no deseada es terrible. Si estás solo porque quieres estar solo, mil albricias. Pero la soledad sin desearla… mata. 

La sociedad se está dando cuenta y ya se trabaja para intentar evitarla, aunque no sea nada sencillo. Pero es un drama. De la soledad no deseada tiene la culpa (dicen) la mala suerte, pero también la propia sociedad dura y adusta.

Como no sabemos en qué momento nos volveremos dependientes, hay que admitirlo antes, y sin presión dejar de pensar en ello pues no podemos hacer nada hoy, que no sea seguir los consejos planteados antes. 

Estos chavales tan jóvenes y guapos también se volverán personas mayores y en su momento terminarán dependientes. Ellos todavía no lo saben y a nosotros todavía no nos toca. 

Así que nos toca seguir disfrutando con optimismo.