En la vida hay muchos problemas. Siempre y desde siempre. Y eso no nos debe preocupar… de momento.
Casi todos esos problemas han ido encontrando soluciones en el tiempo. Y eso es importante saberlo, aceptarlo, valorarlo.
La pregunta que nos tenemos que hacer es: Si todos los problemas en la historia… han ido encontrando diversas soluciones… ¿para qué nos tenemos que preocupar?
La respuesta es: "Por el tiempo".
Es decir, en el fondo más escondido de nosotros no nos tiene que preocupar el problema ni su dificultad, lo que nos preocupa es tener que esperar para que podamos encontrar su solución.
Es interesante que hagamos esa distinción, pues estamos aceptando que efectivamente, tendrá solución, aunque no nos guste nada la espera, no queremos que el tiempo nos cree incertidumbre o dolor.
Es importante esta distinción, pues de esta forma encararemos de otra manera los problemas y sus posibles soluciones.
Ante los problemas, lo que realmente nos duele es la duración del problema hasta que desaparezca o le encontremos una solución válida.